Abrí mi corazón para reconocerme en ti
En tus manos incansables
En tu diáfana mirada
Que pinta nuevos caminos de sueños duraderos
Y de vidas infinitas.
Apagué el tv, cerré la revista y abrí mi corazón
Porque más que desearte un feliz día,
Quiero desearte una vida feliz
Como mujer y como madre.
Decidí apagar la televisión
al darme cuenta que tu entrega por mí
es más grande
que el vapor de la olla a presión.
Cerré la revista
al no encontrar en la vacía publicidad
un jabón suficientemente grande para limpiar
las veces que ofendí el valor de tu dedicación.
Colectivo por la equidad de género
Praxis insumisa- identidad estudiantil